A pesar de ser llamada «la ciudad de las mil torres», San Gimignano es un pequeño pueblo ubicado en las colinas de la Toscana, a unos 50 kilómetros de Siena y a 60 kilómetros de Florencia. Es conocido por su imagen de las 14 torres que aún se conservan en pie, aunque supieron ser unas 72 torres algunos siglos atrás. Las familias más poderosas y adineradas de la época, construían torres para competir con sus vecinos, y ver quién era el que podía hacer la más linda y la más alta. Muchos llaman a San Gimignano el «Manhattan de la Edad Media».

El pueblo toscano no es muy grande. En un día, o hasta en una tarde, se lo puede recorrer casi por completo. Cuando yo fui le dediqué una día entre Siena y Florencia, y les aseguro que volvería. Se entra por las puertas de la ciudad, que está rodeada por la antigua muralla, y ahí nos encontramos con una de las dos calles principales: la Via San Matteo y la Via San Giovanni. No dejen de visitar las 4 plazas con las que cuenta (Piazza della Cisterna, la más linda de todas, Piazza del Duomo, Piazza Pecori, y Piazza delle Erbe).

Fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1990, y desde ese entonces no ha dejado de atraer a turistas de todas partes del mundo. Para ser sincero, me hubiera gustado pasar la noche y recorrer el pueblo ya sin turistas, pero quedará para el próximo viaje por Italia.

Algunos datos prácticos…

País: Italia

Fundación: Siglo III a.C por los etruscos

Nombre original: Sce Gemiane

Superficie: 138 kilómetros cuadrados

Población: 7.700 habitantes

Presupuesto diario: 30-50 dólares

Cómo llegar a la ciudad:

Solo se puede llegar en bus:

• Fuera de la muralla de la ciudad, llegan los buses de las ciudades vecinas. La mayoría de los viajeros vienen desde Florencia, ya que las distancias no son largas (el bus demora una hora y media, y el paisaje de la Toscana es una postal) y cuesta menos de 7 euros el trayecto. No hay otra forma de llegar a la ciudad. No cuenta con estación de tren, y mucho menos con aeropuerto.

Cómo moverse por la ciudad:

A pie. No hay otra forma de conocer San Gimignano y no hace falta transporte para llegar a ningún lado. A caminar, y disfrutar.

Qué comer:

• Panino al lampredotto: este clásico toscano es un sandwich a base de lampredotto, cuyo ingrediente principal es el cuarto estómago de la vaca.
• Panzanella: es una ensalada italiana de trozos de pan remojado en agua, tomates, cebollas, y albahaca. Se completa con aceite de oliva, vinagre y pimienta.
• Bacalao alla livornesa: es bacalao cocinado en una salsa de tomate alcaparras y aceitunas. Simple, ligero y sano.

TOP 5 Principales atracciones:

Bonus track: 3 infaltables

• Rocca: restos de un castillo que se levantó en 1353 cuando Florencia pasó a dirigir el gobierno de San Gimignano, y tiene base pentagonal con cinco torreones de defensa de las que sólo una se puede visitar (la Rocca).
• Maqueta de la ciudad: descubran la maqueta de la ciudad para ver como era en la Edad Media. Se pueden ver las 72 torres que supo tener San Gimignano. La señora que atiende el lugar solo habla italiano, pero logramos entendernos y salvó cuidando nuestras mochilas para poder recorrer más cómodos la ciudad. Una genia.
• Casa Campatelli: para descubrir como era la vida en la ciudad tres siglos atrás. El interior de la torre se conserva exactamente igual a cuando fue construída.

5 consejos prácticos:

• Hagan un Walking Tour: si les interesa descubrir las historias que tiene esta ciudad para contar, un tour puede ser una buena opción. Y sino, lean algo de la historia de San Gimignano antes de ir (o en el viaje en bus), ya que es muy interesante y van a entender mucho mejor este pueblo perdido en el tiempo.
• Pasen la noche en San Gimignano: realmente Italia tiene tanto para ver, que casi nadie pasa más que unas pocas horas en San Gimignano. Yo llegué por la mañana con mil turistas y me fui por la tarde con esos mismos mil turistas. La verdad, es que cuando veía que la ciudad iba quedando vacía, me dieron ganas de quedarme, pero ya había reservado mi hotel en Florencia para esa noche. Otra vez será. Pero debe ser una locura tener ese lugar para uno solo. Bueno, hay unos pocos habitantes permanentes, pero caminar por los callejones medievales por la noche, mientras todos duermen, debe ser toda una experiencia.
• Tomen helado: aunque haga frío, no importa. El helado en San Gimignano es perfecto. Hay quienes aseguran que tienen el mejor helado de Italia (los vendedores de helado de San Gimignano al menos lo afirman). No se si será el mejor, pero es excelente.
• Suban a alguna de sus torres: para tener las mejores vistas y tomar las mejores fotografías del pueblo y de los alrededores. La Toscana es toda linda, pero esta región llena de valles, colinas y viñedos, es de las más lindas.
• Vayan temprano: si llegan antes de la horda de turistas, mejor todavía. Aprovechen así para visitar los edificios del centro cuando todavía no hay mucha gente, y después si piérdanse por las calles aledañas y los restos del castillo, cuando todos los turistas empiecen a hacer filas para subir a las torres. Si van fuera de temporada, mejor todavía.

Ojalá que les sirva esta guía rápida de San Gimignano, la ciudad de las mil torres. Gracias por haber llegado hasta acá, dejen sus comentarios, hagan todas las consultas que necesiten, que voy tratar de ayudarlos con lo que pueda  Si les gustó, compartan en sus redes sociales y suscríbanse, que van a ayudarme un montón.

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